Para tener cuidado...!!!

Villa Pueyrredon: violan a una estudiante secundaria.
24-9-2011
La adolescente de 17 años llegaba tarde al colegio y caminaba apurada cuando un hombre la sorprendió desde atrás y la amenazó con un cuchillo para que no gritara. El agresor la obligó a seguir caminando sin llamar la atención y, unos metros más adelante, la empujó a la entrada de una casa y allí la violó .
El violento episodio ocurrió ayer a la mañana en pleno Villa Pueyrredón. Es el segundo caso de violación que ocurre en este barrio porteño en menos de cinco meses . Por ninguno de los ataques hay detenidos.
Fuentes cercanas a la familia de la chica atacada ayer contaron a Clarín que la adolescente fue interceptada cerca de las siete de la mañana a sólo dos cuadras de su casa . La víctima iba por la calle Ladines y, cerca de la esquina con Bolivia, fue sorprendida por el violador.
La chica iba hacia el Instituto Luján, adonde cursa quinto año. El colegio está ubicado en Zamudio al 5500, a siete cuadras del lugar del ataque.
“El hombre caminó unos metros junto a la chica y luego la metió de un empujón en la entrada de una casa. Allí la violó de una manera muy violenta . En todo momento la amenazaba con el cuchillo”, aseguró un allegado a la víctima.
Según los testigos, una mujer que tiene un quiosco frente al lugar donde estaba siendo violada la chica vio el episodio y empezó a gritar pidiendo auxilio. Fue entonces que el agresor salió corriendo.
“Cuando se fue el hombre, la chica logró levantarse y se volvió a su casa. Desde allí llamó a su mamá y fue llevada al hospital Pirovano. Hasta anoche la adolescente seguía en estado de shock y no recordaba nada de su agresor”, explicaron a Clarín desde el entorno de la víctima.
Familiares y amigos de la estudiante todavía no pueden entender cómo, a plena luz del día, ningún policía llegó a ver lo que pasaba.
Lo mismo había ocurrido en Villa Pueyrredón el viernes 6 de mayo. Entonces, la víctima fue otra estudiante secundaria, también de 17 años, atacada cuando iba al colegio. La chica fue interceptada a las siete de la mañana por un hombre que la obligó a caminar hasta un predio que pertenece a la estación de trenes del ex ferrocarril Mitre (en Condarco y Obispo San Alberto), donde abusó sexualmente de ella. Una vez liberada, la víctima regresó a su casa y, con sus padres, se dirigió a la comisaría a denunciar lo que había ocurrido.
“Desde aquel caso nos quedamos todos muy preocupados en el barrio.
Muchos padres empezaron a acompañar al colegio a sus hijos , aún cuando se tratara de adolescentes”, contó ayer a Clarín una vecina de Villa Pueyrredón. “El problema para esta pobre chica que violaron hoy (por ayer) es que sus papás trabajan a la hora en que ella va a la escuela y no podían acompañarla”, explicó.
En teoría, Villa Pueyrredón es uno de los barrios más seguros de la Capital Federal, ya que sus calles son custodiadas por dos fuerzas policiales diferentes –la Metropolitana y la Federal–, que tienen sus comisarías allí. Pero en la práctica no lo es. En un relevamiento que hizo Clarín en julio pasado sus vecinos denunciaron una ola de inseguridad en la zona.
Los vecinos consultados entonces dijeron que la cuadra más caliente es la de la calle Ladines entre Bolivia y Condarco.
Justo allí fue atacada la adolescente ayer . Contaron que los robos son demasiado frecuentes. “Al principio, la llegada de la Metropolitana se notó y anduvo bien, pero después no se los vio más”, contó uno de ellos, Jorge. “Parece que ahora que abren las comisarías del sur les queda menos gente porque se los ve menos”, explicó el hombre.
Fuentes de la comisaría 47° dijeron ayer a la tarde a Clarín que la familia de la chica violada había hecho la denuncia policial allí.





Afirman que los navegadores de Internet no son seguros
24/09/11



El candado amarillo que aparece en la parte inferior del navegador de Internet cada vez que se ingresa a la página del banco o a la de alguna empresa de compras, parece que no es inviolable como se suponía. Así, comprar por Internet o hacer homebanking podría ser inseguro.
Este bache de seguridad digital fue demostrado ayer en una presentación mundial en el cierre de Ekoparty –evento de seguridad informática que se desarrolló desde el miércoles en la Ciudad Cultural Konex– por Juliano Rizzo, un experto argentino que trabajó la problemática junto a su colega vietnamita Thai Duong.
Estos investigadores descubrieron que lo que se suponía imposible no lo es: cuando van a la computadora del usuario a los servidores de los sitios que presentan el candado amarillo, los datos pueden ser interceptados y vistos por terceros .
Esta vulnerabilidad de todos los navegadores de Internet alcanza a transacciones críticas como las que se realizan en sitios de bancos y de comercio electrónico, entre otros. La falla ya fue reportada a los responsables de los principales navegadores y hasta ahora sólo los reparó Opera. Los más usados (Explorer, Firefox) no los modificaron todavía. “Los demás navegadores repararán el hueco cuando todo tome estado público”, dijo a Clarín el investigador Juliano Rizzo.
El candadito, emblema de la seguridad a la hora de intercambiar datos en Internet, indica que el navegar está usando el protocolo HTTPS que, a su vez, usa el protocolo SCL/TLS 1.0. Este último garantiza tres cosas: autenticidad (el sitio es el que dice ser), privacidad (nadie puede ver los datos mientras viajan entre la PC y el servidor) e integridad (nadie puede modificar esos datos). Hasta ahora se había conseguido vulnerar la autenticidad: un sitio lograba hacerse pasar por otro. Ahora lograron violar la privacidad.
La solución de fondo para el problema es que los navegadores pasen al protocolo SCL/TLS 1.1. Pero lograr un parche sería relativamente rápido y fácil, explicó Rizzo. Y agregó, “Damos a conocer este problema para que se sepa cómo es y para que reparen la falla. No sabemos si alguien ya no está usando esta vulnerabilidad”.
Mientras tanto, habrá que levantar la guardia antes de entrar a la página del banco. Los expertos explicaron que se puede comenzar tipeando, uno mismo, “https” y luego la dirección. Y al hacer una operación crítica, cerrar el resto de las pestañas del navegador.